Este año, las acciones de Banca Cívica han anotado una caída del 37,67 %, tras cerrar la reciente sesión de la semana a un importe de 1,39 euros por título.
El 21 de julio de 2011, las acciones de Banca Cívica salían al market a un importe de 2,70 euros.
La entidad formada por Cajasol, Caja Navarra, CajaCanarias y Caja Burgos, era la segunda entidad producto de una fusión de cajas que salía a Bolsa tras Bankia, que comenzó su andadura bursátil un día antes.
Durante el año presente, Bankia ha extraviado en Bolsa más del 80 % y ha sido nacionalizada por el Estado.
En el caso de Banca Cívica, la entidad se ubica inmersa en un procedimiento de incorporación en CaixaBank.
Ambas entidades revelaban a finales de marzo la absorción de Banca Cívica por CaixaBank, que suponía en ese instante un último paso en la ronda de consolidación bancaria que pretendía acometer el Gobierno e fomentaba con un endurecimiento del saneamiento inmobiliario.
Según estos requerimientos del Gobierno, Banca Cívica tenía que destinar más de 2.000 millones a sanear sus activos inmobiliarios.
Con esta incorporación entre Banca Cívica y CaixaBank, con la que desaparecerá la primera, se coloca fin al proyecto que inició esta entidad, que buscaba dotar a la banca de una dispocisión social y participativa.
En concreto, Banca Cívica quería unir la rentabilidad financiera con las causas sociales.
Según los recientes apuntes divulgados por la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA), en mayo los depósitos captados por Banca Cívica alcanzaron los 45.856 millones de euros, un volumen menor que los 49.864 anotados en marzo.
En cuanto al crédito a la clientela, este así mismo se redujo hasta los 49.755 millones de euros.
El crédito a la clientela concedido por CaixaBank se aumentaba hasta los 193.704 millones de euros, en tanto que los depósitos se reducían hasta 135.331 millones.
